La marca Samsung, una de las líderes de teléfonos a nivel mundial tomó la decisión de poner fin a la producción y venta del Galaxy Note 7 tras los hechos en países de los cinco continentes, según reseñaron diarios como el Washington Post y New York Times.
Según informó el representante de la potencia telefónica, Mike Smith debieron detener el proceso de fabricación de un atractivo celular el cual aspiraban que revolucionara al público y generará la compra de miles de unidades del móvil en cuestión.
Diferentes problemas se presentaron referentes a la batería del celular mencionado produciéndose explosiones e incendios que provocó que se detuvieran las ventas del producto.
Hay que mencionar que la presentación del Galaxy Note 7 se dio en agosto pasado mostrándose como una versión mejorada del Galaxy S7 y el Galaxy Note 5 que traía consigo nuevas posibilidades y características como el escaner de córnea.
Tras esto el modelo se presentaba como la opción que ofrecía perfección a los potenciales compradores siendo reflejado esto en diferentes portales electrónicos y periódicos en los Estados Unidos.
El primer caso de una explosión fue publicada por un rotativo norteamericano a finales de agosto de este año. Dicho acontecimiento se presentó en Corea del Sur, país de origen de la marca Samsung.
Para los días posteriores se repitieron hechos similares alrededor de todo el planeta teniendo que tomar la desafortunada decisión de poner fin a la venta del innovador modelo que buscaba incrementar Samsung.
Seguidamente diferentes aerolíneas optaron por prohibir a sus usuarios que llevaran consigo o en los respectivos equipajes teléfonos de este tipo.
Uno de los hechos más lamentables ocurrió a mediados del mes pasado cuando un hombre sufrió quemaduras de su Galaxy Note 7. De manera simultánea en Corea del Sur se anunció la reanudación de las ventas desde el 28 de septiembre.
Nueve días antes de volver a ofrecer este producto se inició con la sustitución de equipos en la potencia asiática y en otras naciones donde ya se había comenzado con la comercialización del dispositivo.
En esa fecha se afirmaba que los Note 7 ofrecidos en China eran totalmente seguros, y con esto el proveedor de baterías era diferente al resto pero ese día se daba una noticia: un Samsung Galaxy vendido explotaba.
En paralelo con este proceso operadoras como Verizon, T-Mobile, AT &T tuvieron que interrumpir del modelo en cuestión.
Vale destacar que tras el fracaso del Note 7 la marca Samsung tendría que asumir pérdidas de unos 17 mil millones de dólares frustrando y acabando con la intención que aspiraba vender unos 19 millones del dispositivo referido.
Las estimaciones iniciales apuntaban a que los hechos ocurridos le costaran a la compañía unos 5 mil millones pero los problemas continuaron.
El efectivo más negativo para Samsung, cuyo valor en el mercado supera los 235 mil millones de dólares con facturación anual de 179 millones de $. Además hechos como explosiones e incendios podría generar pérdidas incalculables en el futuro próximo.
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